Cómo empezar a hablar inglés
¿Quién no recuerda esa clase de inglés en la que nos tocaba hablar y estábamos temblando? Muy posiblemente debido a una gran falta de confianza y que podemos solventar aplicando las siguientes pautas
1. Pierde la vergüenza al hablar
Bien, esto puede parecer de perogrullo, pero es que es así. La única forma de aprender a hablar inglés es hablándolo. Puedes ver la tele lo que quieras o ser el más listo de la clase en cuanto a gramática, que si no practicas tu inglés hablado…lo siento, pero nunca lo vas a llegar a hablar con fluidez. Y es una de las excusas más vistas en la historia, porque yo he sido el primero en tener vergüenza cuando tenía que hablar en inglés. Pero os diré una cosa. Nadie, repito, nadie, que está en una clase de inglés está ahí para reírse de los compañeros y si salís al extranjero ya ni os digo. De hecho lo mejor que podemos hacer es reírnos de nosotros mismos y darle un toque de humor. Recuerdo haber estado tomando algo en mi estancia en el extranjero, donde estábamos unos cuantos españoles y personas de otras nacionalidades y cada vez que metíamos un cantazo no quedaba otra que reirnos de nosotros mismos como es lógico, al final te lo acabas pasando bien e incluso aprendiendo de dichos errores.
2. Pierde el miedo a cometer errores
Esto viene a colación de lo que estaba comentando antes. “No, yo es que no hablo porque cometo muchos errores jijij”. ¿Y qué te crees, que vas a aprender a hablar un idioma nuevo sin cometer fallos? Pues evidentemente no. Y esto también me ha pasado a mí. Al fin y al cabo, de lo que se trata es de comunicarnos, y ser capaces de transmitir lo que queremos decir, por lo civil o por lo criminal. Si nos han entendido, ¿qué problema hay? Lógicamente poco a poco tenemos que tener ambición e ir puliendo estos errores, que nos harán finalmente alcanzar un buen nivel de inglés. Como he comentado en otros artículos, otro aspecto que me parece un error es pedir perdón por nuestro nivel de inglés. No lo hagáis nunca, todo el mundo va a entender que no estamos hablando en nuestro idioma, por lo que van a hacer un esfuerzo por entendernos y lo van a valorar.
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3. No te frustres contigo mismo
Es imposible cuando estamos aprendiendo expresarnos de la misma manera que lo hacemos en castellano. Siempre se nos van a atascar expresiones o palabras que por lo que sea no somos capaces de transmitir en inglés. Y es normal, porque muchas veces ni existen. Si no encontráis una manera de decir una cosa, decirlo de otra forma, aunque en vuestra cabeza sepáis que no era 100% exacto con respecto a lo que en realidad queríais decir. Pero no por ello hay que frustrarse. A mí me pasaba, metía algún gambazo cuando estaba hablando y cuando ya se había ido la persona con la que estaba hablando se me ocurría perfectamente lo que quería decir. Y me frustraba. Pero al fin y al cabo es aprendizaje. Todas las experiencias que vivamos nos van a hacer aprender. Así que ya sabéis, si esto os pasa, no os frustréis porque es algo que le pasa a todo el mundo, ni somos tontos, ni el idioma es muy difícil, sino que va implícito en el propio proceso de aprendizaje.
4. No te compares con los demás
Esto en realidad se podría aplicar a todos los ámbitos de la vida pero es que en realidad es así. Si nos comparamos con otras personas, normalmente lo haremos con las que saben más que nosotros. Eso es así y me voy a repetir, pero a mí también me ha pasado. Creo que cada uno de nosotros sabe mejor que nadie nuestra situación, lo que hemos estudiado o lo que no, el tiempo que tenemos, cuánto llevamos estudiando inglés…Cada persona es un mundo y es por eso que debemos sentirnos orgullosos de lo que hemos conseguido, porque lo normal es que nos haya costado mucho esfuerzo y sacrificio, y compararte con otra persona lo único que va a hacer es tirar por tierra todo eso. Si os comparáis, que sea de modo positivo y como motivación para alcanzar un mayor nivel, nunca para desmotivaros.
